Cambiar algunos hábitos puede ahorrar energía. Con el aumento de la electricidad y la llegada del invierno, queremos saber cómo reducir las facturas de la luz. Para reducir el consumo de energía, debemos considerar los contratos que hemos firmado con las compañías y la forma en que usamos la energía en casa. En este artículo, puede leer algunos consejos para reducir las facturas de electricidad.
¿Qué contratista de energía debo buscar?
En un contrato de electricidad, debemos mirar el término fijo de la factura que hace referencia a la potencia contratada y el término variable que es la cantidad de energía que consumimos. La potencia nos indica la cantidad de dispositivos que se pueden conectar. Este término es importante en las facturas de electricidad, porque los hogares tienden a tener más potencia de la que realmente necesitan, lo que significa que las facturas de electricidad aumentarán. Para reducirlo, es necesario ajustar la potencia que realmente necesita su hogar.
En cuanto al consumo, tenemos que fijarnos en el precio del kWh que contratamos con la comercializadora, porque afectará significativamente a la factura. Las empresas de electricidad tienen diferentes tarifas, por lo que puedes elegir la tarifa que mejor se adapte a tus necesidades.
¿Cómo reducir el consumo en casa?
Puede cambiar varios hábitos para reducir el consumo doméstico:
-Sustituir los electrodomésticos antiguos por otros más eficientes, lo que supondrá un ahorro y un menor impacto en el medio ambiente. Los electrodomésticos de mayor eficiencia energética son aquellos con la etiqueta de eficiencia energética A. Los precios de estos electrodomésticos son diferentes a los de los electrodomésticos menos eficientes energéticamente, pero a medida que disminuye el consumo de energía, se recupera la inversión.
-El uso correcto de los electrodomésticos también puede reducir el consumo energético, ya que son la principal fuente de gasto energético de los hogares. ¿Cómo usarlos correctamente? Lava siempre con agua fría y a carga completa; para el lavavajillas, use un programa ecológico porque puede suponer un ahorro del 20% en la luz; trate de evitar el secado en secadoras, mejor con luz natural.
-El aislamiento de la vivienda supone una importante reducción del consumo energético, reevaluando la vivienda y aumentando su confort. La capa de aislamiento de la casa evita que el calor o el frío se transfieran del exterior al interior de la casa.
-Desenchufar los electrodomésticos que están en modo de espera puede reducir el consumo de energía. Nuestros dispositivos conectados, como los cargadores móviles, consumen energía sin usarlos. Desconecte los aparatos eléctricos para ahorrar facturas de luz.
-Sustituya las bombillas tradicionales por bombillas de bajo consumo. Las bombillas de bajo consumo proporcionan la misma iluminación y consumen menos energía. La sustitución supondrá un ahorro considerable en la factura de la luz.
-Usar la luz solar tanto como sea posible reducirá el consumo de energía. Además, siempre que salga de la habitación, apague las luces.
-Es muy importante mantener la temperatura ideal en casa, la temperatura adecuada en invierno es de entre 19 y 21 grados. Otra opción es utilizar un termostato para ajustar la calefacción según su horario.
-El mantenimiento de la caldera es fundamental para reducir el consumo energético, asegura que solo se utilice la energía que realmente necesita cuando está en perfecto estado.
La introducción de estas medidas de ahorro en su vida reducirá las facturas de electricidad y, al mismo tiempo, contribuirá a un mundo más sostenible.
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